

El 22 de abril el Gobierno de Canarias modificó algunas medidas preventivas para hacer frente a la crisis sanitaria originada por el COVID-19.
Una de las medidas para hostelería y restauración consiste que, en islas de nivel 1 y 2, deben llevar un registro de entrada de clientes, conservando los datos durante un mes, con su nombre, apellido y teléfono de contacto, además de fecha y horario del servicio.
El sector comenzó a tomar los datos en papel, una tarea administrativa añadida que quita tiempo a los empleados y que vulnera la protección de datos.
Desarrollamos una plataforma digital donde bares, cafeterías y restaurantes se dan de alta y reciben automáticamente un código QR único. Este código deben imprimirlo y colocarlo en la entrada del local o en las mesas de interior.
Los clientes que quieran acceder al interior del local escanean el QR con su móvil, y les aparecerá un formulario con los campos requeridos.
Restaurantes
lecturas de QR
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